El Nuevo Orden pretende ser político (manejo de la gente) y económico (manejo de los recursos), pero fundamentado en el militarismo.
Uno de sus capítulos se escribió con las Revoluciones Libertadoras y la Falsa Independencia, hace 200 años.
La Revolución Francesa así como las Revoluciones libertarias de toda América, sólo buscaban que el PODER cambie de las manos pontificias y monárquicas a las manos burguesas.
Nuestro ilustre General don José de San Martín se apartó drásticamente de la escena político-militar apenas lo comprendió.
Este proceso de dominación y opresión de los pueblos, esta asfixiante pinza político-económica, no dejó de apretar sus tentáculos desde los comienzos mismos de la Historia; el paso del tiempo sólo mejora su metodología.
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